El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) implementó una actualización clave en su sistema de control sanitario para la importación de equinos, mediante la Resolución 817/2025 publicada en el Boletín Oficial.
La medida redefine las condiciones de uso y funcionamiento de los Predios Cuarentenarios de Importación (PCI) y las Unidades de Aislamiento de Importación (UAI), incorporando herramientas digitales y nuevos criterios de bioseguridad para asegurar el cumplimiento de los estándares internacionales en materia zoosanitaria.
El objetivo principal es prevenir el ingreso y la dispersión de enfermedades exóticas que puedan afectar la producción local y el comercio exterior, como la encefalomielitis equina venezolana, una de las más sensibles para el sector. En un contexto de creciente movilidad internacional de animales, esta normativa actualiza los mecanismos de aislamiento y control posterior al ingreso de ejemplares al país.
Uno de los cambios más significativos radica en la digitalización de los trámites, que ahora podrán gestionarse a través de la plataforma de Trámites a Distancia (TAD).
Los interesados en importar equinos o habilitar predios privados como espacios de cuarentena deberán presentar la documentación en línea, incluyendo planos del establecimiento, manuales de bioseguridad y registros de actividad.
El Senasa verificará las solicitudes, evaluará las condiciones del predio y otorgará la autorización correspondiente, con una validez de un año renovable. Cada establecimiento autorizado se incorporará al Sistema Único de Registro (SUR), requisito indispensable para emitir el Documento de Tránsito Electrónico (DT-e) que ampara los movimientos desde los puntos de frontera hacia el sitio de aislamiento.
Esta trazabilidad electrónica no solo mejora la eficiencia administrativa, sino que también refuerza el control logístico sobre los desplazamientos de animales vivos dentro del territorio nacional, un aspecto clave para la bioseguridad y la transparencia en las operaciones de comercio exterior.
La resolución distingue entre dos tipos de establecimientos:
Ambos espacios deberán cumplir estrictos protocolos de higiene, manejo y aislamiento. Además, cada predio contará con un veterinario acreditado ante el Senasa, responsable de supervisar el cumplimiento de las medidas sanitarias, informar cualquier sospecha de enfermedad y garantizar la correcta implementación de los procedimientos de bioseguridad.
En los casos en que los volúmenes de importación superen la capacidad del Lazareto Oficial —ubicado en la Ciudad de Buenos Aires— o cuando las distancias entre el punto de ingreso y el destino final lo justifiquen, los predios privados autorizados podrán funcionar como alternativas logísticas de cuarentena.

Estos ajustes fortalecen la reputación sanitaria del país y garantizan mayor previsibilidad en las operaciones vinculadas a la exportación e importación de animales vivos (Foto: Shutterstock)
Desde una perspectiva logística, la nueva normativa amplía la capacidad operativa para la importación de equinos y reduce los cuellos de botella asociados al control sanitario en frontera. Al permitir la habilitación de más predios bajo control del Senasa y agilizar la gestión de autorizaciones, el sistema contribuye a optimizar los tiempos de despacho y traslado, manteniendo los niveles de bioseguridad exigidos internacionalmente.
La incorporación de herramientas electrónicas y trazabilidad también representa un avance en la gestión documental, alineando los procedimientos locales con los estándares del MERCOSUR y de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA).
Estos ajustes fortalecen la reputación sanitaria del país y garantizan mayor previsibilidad en las operaciones vinculadas a la exportación e importación de animales vivos, un segmento relevante dentro del comercio agropecuario y deportivo de alto valor económico.
Con esta actualización, Argentina busca consolidar un modelo más eficiente, transparente y seguro en el control de las cuarentenas equinas, combinando supervisión técnica, tecnología y coordinación interinstitucional para proteger su estatus sanitario y sostener la competitividad del sector.
fuente: infobae